Vive la memoria como luz que viaja a través del tiempo. Nuestra identidad es un territorio tapizado de diferentes materiales: el corpóreo, el líquido que todo anima, los derivados plásticos, las esencias espirituosas, lo invisible. En conjunto una trama siempre orgánica que lo mismo brota del apareamiento que de la obra misma. Esta es la bitácora de una celebración que nunca termina.

lunes, 30 de marzo de 2009

La orilla del mundo



Cuando dejamos de estar nos fuimos acercando a la mar, comenzamos a sentir que además del origen, ella es nuestro destino: receptáculo de almas, reino del inframundo. 
Y nos preguntamos: ¿en donde esta Dios?, ¿será que como habita en todas partes sea el agua misma?... ¡Si estamos hechos a imagen y semejanza!.


1 comentario:

  1. El mar es un espejo, si no le sonries parece enjado, agrio, desatento, asi pasa con el agua, te regresa las cosas magnificadas, algien por ahí lo inseminó y de esa semilla no dejan de emerger prodigios

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